Leer y escuchar a Juan Ramón Martínez en los medios de comunicación, es ver a una persona que lejos de orientar y dar una opinión objetiva de lo que sucede en el país, si no alguien que todos los días si es preciso se dedica a defender posiciones de los sectores que representa, bajo la imagen de "intelectual".
Es increíble que un "intelectual" continúe aferrándose a una idea aparte de equivocada y mucho tiempo derrotada de una sucesión constitucional, ya en todo el mundo está más qué claro que lo del 28 de junio no fue un accionar democrático, si no que fue un golpe de Estado militar el que sufrió el país con el respaldo de los sectores pudientes.
Él continúa respaldando tan nefasta asonada, además que hasta el cansancio busca justificarla una y otra vez y todavía la vende cómo democracia un golpe militar, verdaderos intelectuales se sentirían ofendidos al ver a alguien que mira que a un presidente lo sacan del país militares, le falsifican una renuncia y destituye un Congreso sin tener facultades y que alguien diga que quiénes hicieron eso, lo hicieron "respetando la Ley y la Constitución" y que son unos "salvadores", esto solo una persona con valores invertidos puede creerlo.
Vincular con democracia a un golpe de Estado es una afirmación hasta demencial, la ruptura del orden constitucional y democrático en el país, la falta de independencia de las instituciones, y Poderes del Estado inoperantes y controlados por el capital, más contínuas violaciones de los derechos humanos y asesinatos políticos, tampoco pueden ser considerados cómo "actos de justicia y de democracia", así cómo tampoco se puede enaltecer la figura militar cuándo siempre fue una institución que atentó contra la democracia y rompió cuántas constituciones quiso en la historia del país.
La tiranía busca convertir todo lo malo a su favor y a la víctima convertirla en el victimario, este papel lo ha desempeñado muy bien Juan Ramón Martínez entre tantos periodistas, desde cuándo se hizo pública la conspiración golpista contra el gobierno de Manuel Zelaya, mediante acusaciones calumniosas, y luego de dado el golpe, ser parte del cerco mediático que buscó sin éxito ocultar la represión de la dictadura de Roberto Micheletti Baín, y que día a día trata cómo el peor demonio a el Frente Nacional de Resistencia Popular.
Es irónico qué hablen de democracia, cuándo abiertamente en columnas, en diarios, en noticieros, se busque censurar a un partido político, solo porque sus militantes estuvieron en contra de un acto delincuencial y anti pueblo cómo el golpe de Estado, los que conspiraron llaman conspiradores a los que se le oponen, siendo quiénes atentaron en realidad contra todo que decían "salvaron".
Mientras en las calles se reprimía y mataba a manifestantes, y la dictadura cerraba medios de comunicación opositores, los hechores del crímen estuvieron ocultando la verdad y tratando de cultivar el odio hacia las personas que se opusieron a lo que hicieron mediante los medios de comunicación controlados por la oligarquía nacional.
El ascenso del partido LIBRE ha recrudecido los ataques a nivel de prensa, una prensa que solo evidencia la desesperación de los sectores de derecha, quiénes ven amenazada su estadía en el poder, y mediante el ataque buscan sostenerse en el mismo.
No se puede andar en la vida amenazando presidentes mediante columnas de diarios, y medios de comunicación que se supone que son "educativos" cuándo no son más que medios pro golpe al servicio de la ultraderecha, tampoco andar amenazando y criminalizando a las personas que salen a las calles a pelear y exigir derechos, estos personajes todos los días buscan convencer al pueblo que luchar es algo malo, que oponerse al actual orden de cosas es convertirse en una amenaza para el país, y que no tienes derecho a gozar de cambios y transformaciones que desees, solo porque a un grupito de personas que el pueblo no eligió cómo tales, se les ocurrió allá en 1981 decidir cómo tendríamos que vivir, y aguantar que una clase política y empresarial nefasta goce de poderes absolutos, y que el pueblo, solo sea un borrego que entierre el dedo en tinta cada 4 años.
No señor esto no es democracia, no puede seguir acusando de conspirador y delincuente al oprimido, ni seguir tratando cómo héroe al opresor, por más que lo siga intentando en los medios de comunicación, no podrá convencer al pueblo, porque ya todos sabemos quién es quién, y a cuáles intereses representa y defiende, y mucho menos culpar a un gobierno que hace 3 años fue derrocado del poder, de todos los desastres que tienen los golpistas actualmente a este país convertido en un Estado fallido.
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